Illustrator: Susana Pales

Descripción

MapMakoko utiliza la cartografía con drones y el periodismo basado en datos para cartografiar un barrio marginal dentro de una megaciudad africana.

Contexto

Se estima que en Makoko, un asentamiento frente al agua en el centro de Lagos (Nigeria), viven unas 250.000 personas, la mayoría en condiciones difíciles. A pesar de encontrarse situada a pocos kilómetros del centro financiero de la ciudad, no muy lejos de sedes de grandes empresas petroleras y de gas en Victoria Island, era, hasta hace poco,  un punto en blanco en el mapa. 

Un equipo de Code for Africa, una organización sin ánimo de lucro que trabaja en relación con tecnología cívica y transformación digital en países africanos, trabajó junto a sus socios y la comunidad local para crear un mapa ascendente y de código abierto de la zona utilizando drones, smartphones y crowdsourcing. Localizarse en el mapa fue un primer paso para que la comunidad afirmara su derecho a existir.

Detalles técnicos y operativos

Makoko es uno de los barrios marginales más singulares de África. Cuenta con un tercio de la comunidad construida sobre diques en una laguna frente a la costa de Lagos a la que sólo se puede acceder en canoa. El resto del asentamiento se encuentra en un terreno pantanoso, con pocos servicios públicos y de saneamiento. Se calcula que en Makoko viven unas 250.000 personas, sin emabrgo, tanto el gobierno como los residentes afirman que la cantidad es mayor. Las cifras son confusas porque la zona aparece como un espacio casi en blanco en los mapas, con poca información sobre estructuras, densidad o calles. Esto significa que es casi imposible hacer un seguimiento adecuado de la propiedad de la tierra, planificar las infraestructuras, optimizar los servicios, planificar una estrategia ante emergencias o apoyar el desarrollo de la comunidad.

El hecho de ser un vacío en el mapa significa que las autoridades nunca asignan adecuadamente los recursos a Makoko o, lo que es peor, se aprovechan de la falta de conocimiento para acaparar la tierra y desplazar a los habitantes. Code for Africa exploró un proyecto de cartografía ascendente que ayudó a la comunidad a luchar por los derechos que posee sobre la tierra. El proyecto combina datos, imágenes por satélite, periodismo multimedia sobre el terreno y narraciones de larga duración. Para llevar a cabo el proyecto y ampliar su impacto, Code for Africa trabajó con múltiples socios: Humanitarian Open Street Maps (HOTOSM), Pulitzer Center on Crisis Reporting, africanDRONE, MakokoDream, CcHUB’s American Corner y The Guardian Nigeria, todos ellos desempeñando un papel fundamental en la ejecución de éste proyecto.

El proyecto comenzó con asociaciones estratégicas y ayuntamientos, con el fin de presentarlo  a la comunidad y conseguir su aceptación. Esto representó un paso fundamental, ya que, años de abandono por parte de los funcionarios y de personas que decían trabajar en su beneficio, habían afectado a su percepción de los forasteros que trabajaban en Makoko. 

Una vez que la comunidad se incorporó, el equipo de Code for Africa trabajó con los habitantes de Makoko para desarrollar sus capacidades y capacitarlos, con el fin de unirlos al proyecto. 

Los socios de la coalición formaron a quince mujeres y diecisiete hombres de la zona para que cartografiaran Makoko utilizando drones, canoas y plataformas de datos abiertos. A lo largo del proyecto se subieron a OpenStreetMap y a Java OpenStreetMap, 990 imágenes captadas por drones. Los voluntarios de Humanitarian OpenStreetMap ayudaron a digitalizar las imágenes. Además, se capturaron 80 puntos de interés (POI) utilizando el kit de herramientas de datos abiertos (ODK) y el conjunto de datos se subió a openAFRICA. Estos PDI incluyen fuentes de agua potable, escuelas, instalaciones sanitarias, lugares de culto, ayuntamientos y otros. 

El proyecto de cartografía se plasmó en un reportaje emblemático producido por el medio de comunicación Guardian Nigeria. Este reportaje combinó el periodismo con drones, el geoperiodismo, la visualización de datos y  multimedia con relatos de primera mano sobre la vida en Makoko para exponer internacionalmente los retos a los que se enfrentan en este barrio. El proyecto tuvo una gran repercusión internacional, con reportajes en la Agencia France Press, Aljazeera, CNN, la BBC y The Guardian UK. 

MapMakoko es un proceso continuo. En 2020, el equipo del proyecto volvió a Makoko y tomó muestras de agua dulce para su análisis, cartografiando otras 20 fuentes de agua limpia para establecerlas como puntos de interés en Makoko. Al equipo de Code for Africa le gustaría seguir cartografiando Makoko a través de futuras oportunidades de subvención, así como utilizar el modelo de colaboración desarrollado allí como modelo para futuros proyectos de periodismo.

En 2021, dos investigadores médicos nigerianos, la Dra. Ayesha Akinkugbe, del Hospital Universitario de Lagos y de la Facultad de Medicina de la Universidad de Lagos, y el Dr. Obianuju Ozoh, del Hospital Universitario de Lagos, en colaboración con el equipo de conocimientos de Code for Africa, llevaron a cabo una investigación científica sobre el terreno. El objetivo de la investigación era determinar los factores que facilitan y dificultan la adopción de la vacuna Covid-19 en el asentamiento informal de Makoko, en Nigeria. El objetivo de la investigación era promover la vacunación contra la Covid-19 e informar sobre las estrategias de participación en la vacunación para esta comunidad.

Despliegue e impacto

Organizar intervenciones en Makoko sobre salud pública en un lugar donde viven cientos de miles de personas sin contar con un mapa sería casi imposible. Una de las intuiciones detrás del mapa era la respuesta frente a emergencias. El equipo de Code for Africa pensó que el mapa podría ser útil en caso de crisis climática, porque con la subida del nivel del mar, éstas personas se enfrentarán a grandes problemas. Pero también para ser usado en casos como el de la pandemia de COVID-19, donde el mapa puede ser utilizado como herramienta por las organizaciones internacionales y también por el gobierno local para organizar el apoyo y distribución de los recursos a la comunidad, como demostraron los investigadores médicos de la Universidad de Lagos (UNILAG) que aprovecharon los datos abiertos de Makoko para realizar una investigación de campo.