Xavier Pueyo

Descripción

 El objetivo de las visitas cálidas de la Cruz Roja Lituana es ayudar a las personas mayores a vivir con mayor calidad en su hogar el mayor tiempo posible, salvaguardando su independencia, fomentando un mayor cuidado de sí mismos y ayudándoles a encontrar oportunidades para ser necesarios en las comunidades locales. 

Contexto

El problema de la soledad en Lituania se ha convertido en un fenómeno de masas. En este país hay más de medio millón de personas mayores de 65 años y el número crece cada año. Una de cada tres personas mayores de 65 años vive sola. Algunos abuelos no salen de casa en todo el año. Según los psicólogos, las personas que experimentan la soledad son mucho más propensas a sufrir depresión, sentirse innecesarias, sin interés y olvidadizas. Para hacer frente a este problema, la Cruz Roja de Lituania creó el programa Visitas Cálidas. Está dirigido a personas solas, en su mayoría ancianos, que rara vez salen de sus casas o residencias por motivos de salud y otras barreras y que además,  no tienen un círculo de personas cercanas. Los voluntarios de la Cruz Roja los visitan regularmente.

Las visitas de los voluntarios de la Cruz Roja a los abuelos solteros mejoran su bienestar emocional. La comunicación, la palabra cálida y la escucha son muy importantes para los abuelos, por lo que los voluntarios se convierten en sus nuevos amigos.

Detalles técnicos y operativos

El objetivo es reducir la sensación de soledad de las personas mayores y esforzarse por mejorar su bienestar a través de voluntarios de la Cruz Roja motivados y formados que visitan regularmente a las personas en sus domicilios y les proporcionan un apoyo psicosocial de calidad;

El objetivo es también ayudar a los mayores a realizar actividades que ya no pueden hacer por sí mismos y animarles a cruzar la puerta de casa cuando sea posible.

El equipo comparte información valiosa sobre formas de superar la soledad, la autoayuda, los beneficios de un estilo de vida saludable y fomenta la adquisición de habilidades útiles que faciliten la vida cotidiana;

El equipo supervisa periódicamente el bienestar de los ancianos solteros e informa a los servicios de apoyo y atención necesarios si es preciso.

Despliegue e impacto

Se asigna un voluntario personal a cada persona mayor;

El voluntario dedica al menos 10 horas al mes a una comunicación de calidad o a actividades conjuntas; Cuando es posible, se organizan clases;

Grupos de voluntarios van a las instituciones asistenciales estatales y organizan actividades de grupo con los mayores (juegos de mesa y de tiempo, cocina, lectura de libros, concursos); Si es necesario, un anciano consulta a un psicólogo;

Enseñamos a los mayores a prestar primeros auxilios a ellos mismos y a los demás; Se vigila constantemente la salud física y emocional de los mayores y se pide ayuda a los especialistas.

En 2021, el programa Warm Visits visitó a 815 personas mayores en su domicilio y a 440 personas mayores en residencias de ancianos.